La noche sirve para lo que sirve, ya me lo decia mi padre,nena... la noche es peligrosa, evita las calles oscuras y los callejones angostos, y yo le decia, papa, si follar tambien se puede a las cinco de la tarde y en la comodidad de una cama... ole!como los toreros!
Es curioso como la noche asustaba a todos los que tenian la dura y ardua tarea de educarme, llevarme por los buenos caminos, como si una quisiera ir por ellos en lugar de por la autopista mas transitada del pecado... el caso es que se iban pasando el testigo de unos a otros y si ya en mi casa logre aprendermela a oscuras para no necesitar encender ninguna luz, en el internado me aprendi los horarios y los huecos y como salir sin hacer ruido...
El problema, recuerdo, no era salir, sino entrar... entrar en casa de madrugrada, con los zapatos en la mano y el sujetador en el bolso, sin que el p... perro se enterara y rezando porque nadie hubiera cambiado las macetas de sitio, mi pobre rodilla aun recuerda cuando hubo un cambio subito, o fue por el alcohol, y los gritos de mi padre..."estas bien...estas bien?", todo ello antes de "una semana sin salir", despues de darse cuenta de mi estado, que pronto cambian de opinion los hombres!!
Entrar en el colegio, saltando otra vez las tapias, despidiendo con un beso al enamorado de turno, y bajandome la falda, componiendo la estampa, mientras subia a la habitacion por caminos ignotos, ignotos para las monjas claro, en este caso me arriesgaba a algo mas que una semana sin salir, no.. no!no teniamos mazmorra, pero casi y no me apetecia nada la confesion con el cura, siempre me parecia que miraba donde no debia un hombre casto... "padre he pecado...", "te arrepientes hija mia...", "bueno...depende..."
Ahora ya salgo de noche sin pudor, y vuelvo a casa tranquila, no es que se hayan acotumbrado, es que AL llega mas tarde que yo!
martes, julio 14, 2009
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